- No hay nadie como tú, y aunque digas que miento... Si me faltaras, me faltaría un cachito de mi.
- Ai, no me digas eso, que me haces sonreir como un idiota.
- Que yo esa sonrisa tuya me la guardaría en un botecito, así para mi, y sería la razón de sonreír por las mañanas, eh? Verías que contenta me iría para las clases pensando en ti.
- Voy a matarte a besos, eh, te lo juro.
- Y a que esperas? Ya estás tardando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Esos putos momentos...
y esas personas que luego te hacen que tengas que arrepentirte. Pero quiero que tú no te arrepientas...
te quiero ast.
Publicar un comentario